Es bonito cerrar los ojos y soñar, es bonito hacerse a la idea de que falta mucho para terminar, guardando la esperanza de hablar (siempre con la misma frase, algún día), resignandote a mirar, sufriendo por no poder cuidar tu corazón mantenerlo vivo, entero...
La vida sinceramente no tiene compasión juega con cada uno de nosotros a modo de traición.
La vida sinceramente no tiene compasión juega con cada uno de nosotros a modo de traición.
No hay comentarios:
Publicar un comentario